Antecedentes
Durante el mes de febrero de 2020, en la Ciudad de México se presentó la “Declaración de Los Pinos (Chapoltepek) – Construyendo un Decenio de Acciones para las Lenguas Indígenas”, que incluye los ejes para desarrollar el futuro Plan de acción mundial para el Decenio Internacional de las Lenguas Indígenas (2022-2032), proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas en diciembre de 2019 y signado por el Gobierno de México.
Entre los principios fundamentales de este documento sobresale la centralidad de los pueblos indígenas en lo que se refiere a la libre determinación; el derecho a utilizar, desarrollar, revitalizar y transmitir a las generaciones futuras, de forma oral y escrita, lenguas que reflejen las ideas y los valores de los pueblos indígenas, sus identidades y sistemas de conocimientos y culturas tradicionales; la igualdad de trato de las lenguas indígenas con respecto a otras lenguas.
La Declaración destaca la necesidad urgente de llamar la atención sobre la pérdida crítica de lenguas indígenas; para preservarlas, revitalizarlas y promoverlas; y tomar medidas tanto a nivel nacional como internacional; garantizar que los usuarios de lenguas indígenas sean reconocidos en las esferas económica, política, social y cultural.
El documento establece direcciones estratégicas de acción, entre las que se encuentran: entornos educativos y de aprendizaje inclusivos y equitativos para la promoción de las lenguas indígenas. Promueve las asociaciones de múltiples interesados a todos los niveles a fin de fomentar las sinergias, el liderazgo, las respuestas adecuadas con una mayor participación de los pueblos indígenas y otras partes interesadas, y el establecimiento de estructuras de colaboración en los planos local, nacional, regional e internacional.
La declaración invita a proporcionar acceso a registros de conocimientos, tecnologías lingüísticas y medios de comunicación indígenas sostenibles, viables y asequibles; apoyar a los pueblos indígenas en la salvaguardia de su patrimonio inmaterial, expresado mediante la lengua, las canciones, los mitos, los juegos de palabras, la poesía y otras tradiciones orales.
Las tecnologías digitales desempeñan una función cada vez más importante en el actual entorno, al contribuir a la transmisión intergeneracional, la preservación, la revitalización y la promoción de las lenguas indígenas, así como a la creación en dichas lenguas.
Objetivo
En este contexto, la Dirección de Comunicación Social del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, a través del proyecto de medios digitales, ha perfilado una estrategia digital para dar un soporte inicial a la ejecución de los objetivos de la Declaración de Los Pinos (Chapoltepek).
Se ha desarrollado una plataforma colaborativa en línea en la que puedan confluir diversas iniciativas gubernamentales, académicas y comunitarias enfocadas al estudio, difusión y preservación de las lenguas indígenas.
El proyecto DILIMX busca consolidarse como una propuesta para la integración de múltiples contenidos en lenguas indígenas. Un diagnóstico preliminar permite observar que cada iniciativa, institución y promotoría de la esfera lingüística, basa su impacto en canales de distribución y difusión limitados. Existen múltiples repositorios donde se alojan contenidos editoriales, multimedia, audiovisuales y desarrollos tecnológicos. Los interesados en los distintos materiales desconocen su existencia, y en el mejor de los casos se dedican a recolectar estos recursos para un propósito específico.
Estrategia colaborativa
Una plataforma colaborativa permite la integración de toda la información relacionada a las 68 agrupaciones lingüísticas y sus variantes, donde confluyen no solo los contenidos digitales existentes hasta hoy, sino los nuevos contenidos creados por los hablantes de las propias comunidades.
Un instrumento de esta naturaleza también puede ofrecer capacitación y acompañamiento para promotores de lengua, comunicadores, videoastas, escritores en lenguas indígenas y maestros bilingües.