La Universidad de las Lenguas Indígenas de México (ULIM) es uno de los proyectos más importantes que formarán parte del Decenio Internacional de las Lenguas Indígenas (DILI) 2022.
De acuerdo con Natalio Hernández, intelectual, poeta nahua y coordinador del Proyecto de la Universidad de las Lenguas Indígenas, la apertura de esta identidad educativa quedará en manos del DILI, pues este contribuirá a visibilizar las lenguas mexicanas y ver cómo se vuelven estudio en todo el sistema educativo.
Sin embargo, se espera que el estudio no solo sea en hablantes nativos, sino para todas las personas que radican en regiones inter y multiculturales, señala el coordinador en entrevista para Canal Once.
Esta institución contará con cuatro carreras universitarias:
- Formación de profesores en lenguas indígenas.
- Interpretación y traducción.
- Literatura en lenguas indígenas.
- Comunicación intercultural (comunicación indígena intercultural).
Si bien es cierto que existen muchas personas impartiendo clases en sus lenguas maternas para así darlas a conocer, no hay profesores formados técnica y profesionalmente para que puedan enseñar las 68 diferentes lenguas originarias de la nación, por lo que con esta nueva oportunidad se da pauta a que lleguen a más gente.
Con la carrera de comunicación indígena intercultural, se buscará que los pueblos indígenas entren en diálogo con la sociedad mestiza de hispanohablantes, para que de esta forma todos podamos sentirnos orgullosos de nuestras raíces lingüísticas, históricas y culturales, ya que estás son nuestras “raíces milenarias”, comenta Hernández.
“Estoy muy contento porque en los próximos años vamos a ver, en el tiempo mediato e inmediato, como nuestras lenguas van a empezar a desarrollarse y va a haber un florecimiento, renacimiento que sin duda, contribuirá al reconocimiento de la importancia de nuestras lenguas mexicanas porque constituyen a la memoria, la raíz y la fuerza de nuestra identidad como mexicanos. Somos una nación pluricultural y multilingüe”, comenta el poeta nahua.
Además, se contará con un programa de extensión universitario para poder atender a aquellas lenguas que se encuentran en peligro de extinción como es el caso del tlahuica u ocuilteco, pertenecientes al Estado de México, o como el tuzanteco de Chiapas, pues en la actualidad ambas lenguas tienen pocos hablantes y tendrán atención prioritaria.
Esta extensión busca la suma de otras universidades nacionales para que de esta manera se puedan encargar de forma más personalizada en las lenguas en peligro a desaparecer de cada estado apoyando y contribuyendo a que se mantengan y se desarrollen. Por ejemplo, la Universidad de Sonora se enfocaría en el pápago.
La sede estará ubicada en la alcaldía de Milpa Alta y se espera que se inaugure durante este año.
Por Saraí Domínguez